La Secretaría de Cultura de SADOP realizó un encuentro del que participaron las Seccionales de la Región Centro del país.
“Malvinas tuvo muchos actores en los márgenes, que son aquellos olvidados en los relatos, a los que no se les hizo lugar, que no se los ha investigado”, sostuvo María Elena Otero, investigadora CEA/FCS-UNC, durante el encuentro Pensar Malvinas, realizado en conjunto entre la Secretaría de Cultura de SADOP y las Seccionales de la Región Centro del país, en el que se analizó la guerra desde una perspectiva de género.
“En los últimos años hubo un cambio de la condiciones de producción discursiva que nos permitió que las memorias de las mujeres que participaron de la guerra sean escritas y escuchadas en el espacio público”, remarcó la investigadora durante el evento llevado a cabo por Zoom y trasmitido en vivo por Facebook .
El excombatiente de Malvinas, docente y militante de SADOP, Walter Stefenon, recordó: “He tenido compañeros en Malvinas que heridos fueron recibidos en continente, atendidos, contenidos y cuidados por mujeres que hasta el día de hoy no son reconocidas”.
“Estar hoy acá con compañeros delegados compartiendo esta experiencia para mi es hermoso, porque el Sindicato me dio mucha contención y apoyo”, aseguró Stefenon.
El encuentro, fue organizado en conjunto por las Seccionales Provincia de Buenos Aires, Ciudad de Buenos Aires, Córdoba, Rosario, Santa Fe; y por la Secretaria de Cultura Nacional de SADOP Alejandra López y su equipo de trabajo.
También estuvo presente Marina Jaureguiberry, Secretaria Gremial del Sindicato. “Malvinas es la Patria, es una memoria, es un lugar, es un territorio físico, pero también es emocional, político, ideológico”, explicó y agregó que “en esos términos hay que analizar que significa pensar Malvinas, y que significa ‘desmalvinizar’ porque no es gratis ni inocente de parte del neoliberlismo este proceso”.
El Secretario General de SADOP, Jorge Kalinger, fue el encargado de cerrar el encuentro y eligió “poner en relieve el accionar de las mujeres durante la guerra, heroínas que participaron como enfermeras, radio operadoras, asistentes que después fueron cuidadoras de muchos excombatientes por las secuelas que les dejó Malvinas”.
“Es una obligación de SADOP seguir militando la causa para que no se ‘desmalvinice’ la memoria, para no olvidar lo que significa el reclamo sobre la soberanía de esas Islas”, concluyó Kalinger.