La iniciativa surge a partir de la polémica presentación que realizó días atrás el concejal Aldo Pedro Poy y que a entender de la entidad gremial “es tan superflua que no analiza ni considera los peligros implícitos del filmar y emitir esas imágenes vía internet”.
De esta manera, el gremio instala la discusión en torno a algunas propuestas efectistas y de alto impacto mediático pero que analizadas con mayor profundidad son un elemento que redunda en inseguridad, estigmatización y mal control; es decir, exactamente lo opuesto a lo que se procuraba.
“Las cámaras disocian la relación entre familia e institución educativa para ponerlos en una situación de vigilado y vigilante”, sentenció Martín Lucero, secretario general de la entidad. Y destacó que el objetivo “es poner en valor las responsabilidades conjuntas de docentes y padres tanto en el cuidado y educación de los chicos”.
Cabe destacar que la producción general, actuaciones y edición fueron realizadas por miembros del concejo directivo y delegados de Sadop Rosario.
El material se difundirá por redes sociales, medios electrónicos y la página web de Sadop Rosario.