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Antonio Caló: “Nadie mejor que los dirigentes gremiales para saber los problemas de salud de nuestros afiliados”

  • Publicación de la entrada:13 junio, 2014
  • Tiempo de lectura:3 minutos de lectura

El Sindicato Argentino de Docentes Privados (SADOP) inauguró el nuevo edificio de su obra social OSDOP, con la presencia del Secretario General de la CGT, Antonio Caló y el Secretario General del gremio, Mario Almirón, entre otros dirigentes y funcionarios.

“Nadie mejor que los dirigentes gremiales sabemos los problemas de salud que tienen nuestros afiliados”, aseguró Caló frente a la gran cantidad de representantes de diferentes gremios de la CGT y del gobierno que participaron del acto. Además, se entusiasmó al destacar las virtudes de SADOP y los logros que consiguen los gremios: “Acá tienen, para todos que decían que los dirigentes sindicales solo sabíamos cantar la marcha, tocar el bombo y hacer algún paro de vez en cuando”.

“Nosotros defendemos el sistema solidario de las obras sociales sindicales. Somos críticos y nos diferenciamos del criterio mercantilista de las prepagas”, remarcó por su parte, Mario Almirón. Quien además destaco que creen “en el valor de la solidaridad” y tienen “un compromiso con cada docente. Trabajamos para no dejarlo solo en los momentos de perdida de la salud o en la enfermedad”. 

Para SADOP es un gran logro contar con un edificio propio para su Obra Social y un orgullo que a pesar de dificultades por las que ha pasado el país a lo largo de los 67 años de vida del Sindicato, nunca dejó de cumplir con sus obligaciones, ofreciendo soluciones para cada uno de sus afiliados. 

En el corte de cinta el Vicepresidente de la Obra Social, Secretario de Relaciones Institucionales del  Sindicato, y miembro de CGT, Horacio Ghilini pidió: “Hagamos del sindicato y de la obra social un hogar, y ese hogar debe ser alegre, porque la alegría trae salud”. 

El nuevo edificio cuenta con la mayor sofisticación en su diseño y tecnología, y es la materialización de un sueño por el que SADOP ha luchado y trabajado durante años. Es el resultado del esfuerzo de cientos de personas que lo hicieron posible.

La Obra Social, que funciona desde la década del ’60, conoce cuáles son las enfermedades de los docentes y actúa en consecuencia. Además trabaja a diario para ofrecer cobertura en todo el país a sus 200 mil afiliados a lo largo de todo el territorio.

“Estamos felices con esta inauguración, pero no por el edificio en sí, sino porque lo vemos como un medio para mejorar a diario la vida y la salud de quienes son nuestro motor y centro, los docentes privados”, concluyó Almirón.