Declaración final del Seminario internacional “Educación popular e integración regional: vigencias y perspectivas de Paulo Freire”

  • Publicación de la entrada:29 abril, 2013
  • Tiempo de lectura:6 minutos de lectura

– La necesidad de recoger el legado de Paulo Freire y su pedagogía de la liberación y la esperanza continuando  su legado y sus enseñanzas para este inédito cambio de época que han iniciado la mayoría de los gobiernos y pueblos de la región en esta última década. Creemos que la  Pedagogía popular de Paulo Freire es un instrumento de Liberación para continuar profundizando en la descolonización pedagógica y cultural que necesitan los pueblos de Nuestra América para lograr su 2ª independencia,  el cumplimiento de la justicia social y la ampliación de los derechos de los trabajadores.

– Creemos que la propuesta de Friere sigue vigente en los siguientes aportes fundamentales: a) el diálogo intercultural  como método de construcción colectiva del conocimiento y la transformación fundamental de nuestras sociedades orientadas  al ser humano desde una praxis social y política liberadora, b) la práctica educativa como herramienta pedagógica en la lucha de liberación contra las diferentes modalidades de la opresión y la violencia d) la teoría de las “fisuras” que expresa una "acción cultural para la libertad".

– La pedagogía de la educación popular y emancipadora sigue siendo una referencia para la elaboración en torno a la descolonización pedagógica y cultural de nuestros pueblos, como propuesta contrahegemónica al  imperialismo intelectual, cultural y político. Esta pedagogía es constructora de sujetos críticos, nos hace  sujetos de la historia y contribuye a la construcción de  nuestras identidades regionales, tanto en su dimensión histórica y concreta, como en su dimensión  potencial de proyectos integradores de nuestras regiones.

– Hacemos nuestro el aporte de trabajar con la propuesta pedagógica de Freire aplicada al ámbito de las TICS, ya que el mismo permite concebir al aula y la escuela  como  un espacio más horizontal, cooperativo, colaborativo no jerárquico. La apropiación de los maestros y los alumnos de las TICS debe ser a partir del intercambio, el diálogo, la generación de preguntas, problematizando, cuestionando y produciendo sentido para leer el mundo desde una perspectiva crítica y liberadora.

– Nos comprometemos desde el SADOP y la FLATEC impulsar la propuesta de una corriente pedagógica de la liberación que incluya las enseñanzas de Freire, Simón Rodríguez y tantos otros para que la misma sea incorporada a las currículas educativas y los programas de formación docente. Es necesario que esta pedagogía no quede solamente encerrada al ámbito de contextos educativos informales, sino que sea llevada al plano de una política educativa, tanto en la educación de gestión pública como de gestión privada –donde la resistencia a esta concepción educativa- es aún más resistida. 

– Los trabajadores de la educación debemos ser  sujetos protagónicos de una pedagogía emancipadora en el sentido que ésta tiene en cuanto a) formación para la autonomía del pensamiento, promoviendo una soberanía cognitiva y de la comprensión; b) formación integral, ayudando a desplegar el saber hacer, el saber pensar, el saber decir, el saber expresar y el saber convivir superando la división social capitalista del trabajo; c) formación para una ciudadanía plena, en una democracia protagónica y participativa; d) formación para el trabajo liberador.

– Nos comprometemos contribuir a la promoción de una  Política Educativa en clave de Educación Popular, replanteando  los proyectos institucionales, valores, diseños curriculares y la práctica educativa en el aula; centrados en el pueblo como sujeto de la historia. Concebimos al sindicalismo docente como la gran avenida de construcción de esas prácticas re-significadas devenidas en Políticas Educativas.

– Los trabajadores organizados tenemos mucho que aportar a una pedagogía popular que sea capaz de revertir  lo que la globalización unipolar desfragmentó. Para ello  nuestros pueblos deben convertirse en el  sujeto histórico central de ese proceso, asumiendo la interculturalidad y la preeminencia ética de los marginados de la tierra que hoy nos siguen interpelando.

– SADOP y FLATEC hemos emprendido la tarea de constituir parte activa del proceso de liberación de nuestros pueblos y estamos comprometidos a incorporar todos nuestros esfuerzos y nuestra experiencia sindical para potenciar los espacios de integración regional que apunten a ese objetivo de liberación. Los procesos de integración vigentes hoy en Nuestra América como la UNASUR, CELAC, MERCOSUR y ALBA para  ser genuinos y sostenerse en el tiempo deben ser expresión del poder popular, sus demandas, sus derechos y conquistas. A su vez, tienen que estar expresados en una pedagogía crítica y transformadora

– Al mismo tiempo, renovamos nuestro compromiso con nuestros compañeros que organizados y solidarios enfrentan diariamente la ofensiva de gobiernos imperialistas y de derecha, luchamos y lucharemos con ellos por su emancipación y haremos los esfuerzos necesarios para incorporarlos a la tarea liberadora como trabajadores y educadores. Nuestro aporte quiere ser no sólo en la continuación de una pedagogía crítica, dialógica, esperanzadora y constructora de un mundo más justo y solidario sino también promover la transición de un sindicalismo de protesta hacia un sindicalismo de proyecto, propositivo de un modelo de producción y distribución de la riqueza que favorezca  a los trabajadores de nuestros pueblos.    

 

Ciudad de Buenos Aires, 25 de abril de 2013